Los cáusticos se pueden clasificar en dos tipos principales: alcalinos y ácidos.
Los cáusticos son sustancias muy peligrosas y deben manipularse con extrema precaución. Al trabajar con cáusticos, es importante utilizar siempre equipo de protección personal, como guantes, gafas de seguridad y ropa protectora. También es importante seguir las instrucciones de seguridad del producto.
Los cáusticos tienen una amplia gama de usos, que incluyen:
Los cáusticos son sustancias químicas peligrosas que deben manipularse con extrema precaución. Al comprender los riesgos de los cáusticos, podemos tomar medidas para protegernos a nosotros mismos y a los demás.