La sepsis grave es una condición potencialmente mortal en la que la respuesta del cuerpo a una infección causa inflamación generalizada. La inflamación puede dañar los órganos y tejidos, lo que puede provocar insuficiencia orgánica y muerte.
Los síntomas de la sepsis grave pueden incluir:
* Fiebre o hipotermia
* Frecuencia cardíaca rápida
* Respiración rápida
* Presión arterial baja
* Confusión
* Náuseas y vómitos
* Diarrea
* Dolor abdominal
La sepsis grave puede ser causada por cualquier infección, pero las infecciones más comunes son las infecciones del tracto respiratorio, las infecciones del tracto urinario y las infecciones de la piel.
El diagnóstico de la sepsis grave se basa en los síntomas y los resultados de las pruebas. Las pruebas que se pueden realizar para diagnosticar la sepsis grave incluyen:
* Hemograma completo
* Pruebas de función renal
* Pruebas de función hepática
* Cultivos de sangre
* Rayos X de tórax
El tratamiento de la sepsis grave se centra en controlar la infección y la inflamación. El tratamiento puede incluir:
* Antibióticos
* Líquidos intravenosos
* Medicamentos para reducir la inflamación
* Soporte ventilatorio
El pronóstico de la sepsis grave depende de la gravedad de la infección y de la rapidez con la que se reciba el tratamiento. La sepsis grave es una condición grave, pero con un tratamiento oportuno, la mayoría de las personas se recuperan.
La mejor manera de prevenir la sepsis grave es prevenir las infecciones. Esto se puede hacer mediante:
* Una buena higiene
* La vacunación
* El tratamiento temprano de las infecciones
La sepsis grave es una condición potencialmente mortal que requiere atención médica inmediata. Si presenta síntomas de sepsis grave, busque atención médica de inmediato.
